Rogelio Ramírez de la O presentó su renuncia a la presidenta Claudia Sheinbaum, con lo cual dejará de estar al frente de la Secretaría de Hacienda, de acuerdo con fuentes cercanas a la dependencia.

Rogelio Ramírez de la O presentó su renuncia a la presidenta Claudia Sheinbaum, con lo cual dejará de estar al frente de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), de acuerdo con fuentes cercanas a la dependencia.  

Ramírez de la O, quien fuera cercano al expresidente Andrés Manuel López Obrador, llegó a la dependencia en julio del 2021, luego de la salida de Arturo Herrera. Desde entonces, ha sido la cara de la dependencia a cargo de la política fiscal del país.

Esta sería la primera renuncia presentada en el gobierno de Claudia Sheinbaum. La presidenta solicitó el año pasado la permanencia de Ramírez de la O y parte de su equipo en Hacienda para abordar el reto de la consolidación fiscal para este año.

Ramírez de la O se caracterizó por tener pocas presentaciones en público. Si bien mantuvo su cercanía con inversionistas, se apoyó de sus dos subsecretarios de Hacienda que trabajaron con él: Gabriel Yorio, durante el sexenio de López Obrador, y Edgar Amador Zamora, actual subsecretario y quien ahora es una de las personas a quienes perfilan para el puesto al frente de la SHCP.

Serio, reservado, así fue siempre Ramírez de la O, con muy pocas apariciones, entrevistas y conferencias. Los más cercanos a él aseguran que no le gustaba estar en el ojo público, por lo que desde hace ya tiempo se sabía de su deseo de abandonar el cargo.

Apenas el jueves, Ramírez de la O acudió a Palacio Nacional a la reunión con la presidenta para abordar, una vez más, el tema de los aranceles, con lo cual evitó asistir a las 33 Reunión Plenaria de Consejeros Consultivos de Banamex, a la cual acudió en su lugar Edgar Amador.

Su renuncia se da no sólo en medio de un año donde uno de los mayores retos de las finanzas públicas es disminuir el déficit fiscal de 5.7 a 3.9% del PIB, sino que también la economía mexicana está expuesta a los choques externos, principalmente por las políticas en materia arancelaria por parte de Estados Unidos.