Oaxaca.-La Unidad de Inteligencia Financiera (UIF) de México ha intensificado sus acciones contra empresas fachada en la industria manufacturera, particularmente aquellas que simulan procesos productivos para beneficiarse indebidamente de incentivos fiscales y aduaneros.

 

Estas medidas forman parte de la llamada “Operación Limpieza”, impulsada por la Secretaría de Economía y respaldada por el gobierno federal, con el objetivo de combatir el contrabando, la evasión fiscal y la competencia desleal en sectores clave como el textil y el calzado.

 

¿Qué hizo la UIF?

Congelamiento de cuentas: Por instrucción de la presidenta Claudia Sheinbaum, la UIF congeló las cuentas bancarias de los propietarios de empresas acusadas de simular procesos de manufactura con compañías fachada. Estas empresas abusaron de la importación de insumos libres de aranceles bajo el programa IMMEX, importando productos terminados que luego vendían en el mercado nacional, evadiendo el pago de aranceles, IVA e ISR.

 

Cancelación de programas y licencias: Además del congelamiento de cuentas, se cancelaron los permisos del programa IMMEX y se solicitó la revocación de licencias o patentes de agencias aduanales involucradas en estos esquemas fraudulentos.

 

Entre las empresas señaladas y clausuradas se encuentran Kaizen Incy Co Production de Tijuana, Soluciones Empresariales MH Fashion y Philkor Trends en Ensenada, y Grupo Maquilador Sin Frontera en Zapopan, Jalisco. Estas compañías, en conjunto, realizaron importaciones por más de 9 mil millones de pesos.

 

¿Cuál era el modus operandi?

Las empresas fachada simulaban procesos de manufactura para acceder a beneficios fiscales del programa IMMEX, que permite importar insumos sin aranceles para la producción de bienes de exportación.

 

Sin embargo, en vez de exportar, introducían productos terminados al mercado mexicano, vendiéndolos sin pagar los impuestos correspondientes, lo que generaba competencia desleal para la industria nacional.

 

El sector más afectado ha sido el del calzado, con un incremento del 959% en importaciones bajo este esquema, y el textil, donde se han detectado operaciones simuladas por hasta 15 mil millones de pesos.

 

Impacto en la industria y respuesta empresarial

La industria nacional, representada por organismos como la Concamin, Canaical, Ciceg, Canaintex y Canaive, ha respaldado estas acciones, señalando que el contrabando y la subvaluación han provocado la pérdida de 95,000 empleos y caídas en producción y ventas durante dos años consecutivos.

 

Los industriales insisten en la necesidad de fortalecer la fiscalización aduanera y excluir el calzado terminado del programa IMMEX para evitar nuevos fraudes.

 

Se han cancelado más de 40 patentes aduanales relacionadas con estas prácticas y se ha dado vista al SAT para que realice auditorías y, en su caso, determine créditos fiscales y cancele certificaciones de IVA-IEPS.

 

El gobierno federal ha impuesto un arancel general del 35% a textiles para frenar la entrada de productos subvaluados, aunque la medida no está dirigida exclusivamente a un país.